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La Ciencia atrás de los Power Naps

Cuando se hacen correctamente, las siestas pueden reducir el estrés, levantar el ánimo y mejorar el aprendizaje. Una siesta perfecta puede ser un reinicio energizante que ni siquiera tu café favorito podría lograr.

Hay una forma correcta de tomar una siesta, y tenemos los detalles para ti.

Todos hemos estado ahí: nos acostamos para tomar una siesta y despertamos sin siquiera saber qué día es. Las siestas, cuando se exceden, pueden causar desorientación y aumentar la sensación de letargo. Pero cuando se hacen correctamente, las siestas pueden reducir el estrés, levantar el ánimo y mejorar el aprendizaje. 

Beneficios de las Siestas

Algunas personas recurren a las siestas cuando intentan recuperar el sueño, pero una buena siesta es igualmente beneficiosa para las personas que ya descansan lo suficiente. Esto se debe a que se dice que las siestas aumentan la productividad y la alerta, al mismo tiempo estimulan la creatividad y las habilidades de pensamiento crítico. Piénsalo como una recarga rápida. A diferencia de una noche completa de descanso, una siesta no tiene por objetivo alcanzar el sueño REM. Solo busca descansar la mente y eliminar la fatiga. Puedes entrar en una etapa de sueño no REM reparador en menos de media hora, mientras que siestas más largas, de una o dos horas, pueden tener tantos beneficios como una noche completa de sueño.

Planificar la Siesta

Agregar tiempo de siesta a tu rutina no tiene por qué ser tan consumidor de tiempo como parece. ¡20 minutos es todo lo que necesitas! El objetivo final es quedarse dormido lo más rápido posible para maximizar tu estado de descanso. Por lo tanto, es mejor tomar una siesta a media mañana o justo después del almuerzo. Los estudios demuestran que las siestas a última hora de la tarde son más propensas a dejarte con una sensación de pereza o somnolencia posterior. Otra forma de programar tu siesta es alrededor del momento en que los efectos de la cafeína matutina comienzan a desaparecer. 

Optimizar el Descanso

Dado que la siesta está destinada a ser corta pero efectiva, querrás asegurarte de aprovecharla al máximo. Un entorno oscuro y silencioso es la mejor manera de lograrlo. Encontrar oscuridad a media mañana o por la tarde puede ser difícil, pero usar una máscara para los ojos resolverá el problema. ¡No dejes que la hora del día te impida ponerte cómodo! Mantenerse cómodo y fresco es importante para lograr un sueño realmente reparador. Y si te preocupa quedarte dormido por demasiado tiempo, simplemente configura la alarma con antelación para dormir sin preocupaciones.

No te Obligues

La siesta del mediodía solo es realmente efectiva cuando te sientes cansado o con poca energía. Forzarte a dormir puede resultar en inquietud, frustración y, en última instancia, en la falta de sueño por completo. Cuando el sueño no llega fácilmente, en su lugar puedes dar un paseo por la tarde, probar una rutina de ejercicio corta o comer un refrigerio nutritivo; todas estas acciones mejorarán tu descanso nocturno, te devolverán la energía y harán que tus ideas creativas fluyan nuevamente.

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