Dormir es esencial para nuestro bienestar físico y mental, pero ¿qué hay de soñar? Freud creía que los sueños eran la puerta para entender la mente inconsciente, nuestros deseos ocultos y otros pensamientos, mientras que Carl Jung los consideraba una forma de expresar las cosas abiertamente y de comunicar información importante.

Aunque hay muchas teorías detrás de los sueños, algunos especialistas han encontrado que esta actividad brinda algunos beneficios para la salud.

Los sueños mejoran el aprendizaje

Aunque parezca sorprendente, soñar puede ayudarte a aprender mejor. Soñar ayuda a tu cerebro a comprender mejor nueva información, según los investigadores de la Facultad de Medicina de Harvard. De hecho, si aprendes una tarea y luego duermes, puedes ser mucho mejor en esa actividad que si te hubieras mantenido despierto. 

¿Sueños terapéuticos?

Lo que experimentamos cuando soñamos son básicamente fantasías (como soñar que viajas en el Titanic #truestory), sin embargo, las emociones que las acompañan son bastante reales. 

Así, los sueños tratan de despojar a una experiencia de la emoción, creando un recuerdo de la misma y desactivándola de cierta manera. Este mecanismo cumple un papel importante porque cuando no procesamos nuestras emociones, especialmente las negativas, nuestra preocupación y ansiedad aumentan a la luz del día. 

Supera tus miedos

Esto se aplica más a los sueños lúcidos (cuando eres consciente de que estás soñando). Por ejemplo, si tienes miedo de hablar en público, en un sueño lúcido, tienes el control total y nada que perder. Puedes practicar lo que temes hacer en la vida real. Cuanto más practiques, más reprogramarás tu cerebro. A medida que pase el tiempo, perderás ese miedo en el mundo real.

Sin duda, los sueños tienen un significado y un papel importante en nuestras vidas. Por ello, es importante tomarse el tiempo necesario para dormir y soñar, así que te deseamos ¡dulces sueños hoy y siempre!